Dos personajes que son insignia del Barbosismo enfrentan una cruenta batalla que podría perjudicar los planes de su jefe el gobernador Miguel Barbosa.

Se trata de Gabriel Biestro, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado y Eric Cotoñeto, influyente operador político de Miguel Barbosa.

Ambos están muy cerca de Miguel Barbosa, gozan de su confianza, pero Cotoñeto no apoya a Biestro por las formas en que el segundo ha exigido que todos se sumen a su proyecto.

Las aspiraciones de Biestro parece que se quedarán solo en eso: en aspiraciones porque a pesar de querer la alcaldía de Puebla no ha logrado convencer ni sumar al poderoso operador electoral Eric Cotoñeto, a quien quiere tratar como su empleado.

Cotoñeto ha jugado muy inteligente y pidió ir a operar personalmente al interior del Estado, para que no lo responsabilicen de la dolorosa derrota que sufrirá el líder del Congreso.

Tampoco Biestro a podido sumar a la alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, quien tiene una gran influencia en los comités estatal y municipal de Morena y podría aparecer en la boleta electoral del 2031.

Biestro llegó por la ola AMLO del 2018 y es muy difícil que gane la alcaldía porque no tiene carrera política y el apoyo de importantes actores políticos. También por el desgaste de Morena en el poder.

No importa que lo apadrine Javier Pacheco Pensado, quien se ha convertido en su operador político y posible aportador financiero, aunque sepa que esta vez su gallo no ganará.

Algunos medios de comunicación no han entendido la dolorosa experiencia de casarse con proyectos políticos y por ello hablan y alaban a Biestro, a pesar de que nuevamente caigan en el desprestigio.

Por cierto: ¿alguien ha visto a los operadores políticos de Cotoñeto con Biestro?

Es pregunta.