La rectora de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), Lilia Cedillo Ramírez, se ha ganado el respeto y reconocimiento de la comunidad en general.
En estos tiempos, no es fácil tener respeto y credibilidad, por ello recalco esos logros de la rectora Cedillo.
Pero también la rectora ha tenido absolutamente orden universitario. Y eso es digno de estudiar, analizar y reconocer.
Ha cumplido metas, objetivos e impulsado proyectos importantes.
A su llegada como líder de la BUAP, unos despistados le apostaron al caos e ingobernabilidad. Se equivocaron.
A Cedillo le tocó ser rectora en un momento muy complejo y de alta capacidad política, que pasará a la historia y que será analizado y comparado de manera inevitable.
Cedillo utilizó la principal herramienta de la BUAP: la comunidad universitaria -que conoce perfectamente-, y comenzó a engranarla en el proyecto que encabeza, y el que por cierto, está muy lejos de ser político.
Muchas victorias esperan a la BUAP y muchos logros nos dará la rectora Cedillo, una mujer forjada en la academia, investigación y las mismas entrañas de la institución que ahora dirige.
¡Que vengan más victorias!
