La llegada de Marko Cortés a la dirigencia nacional del PAN es un regalo de Navidad adelantado para Andrés Manuel López Obrador.
Y es que Marko Cortés es en gran parte responsable de la derrota del PAN en la pasada elección presidencial por ser parte de la tríada que ha secuestrado al blanquiazul junto con Ricardo Anaya y Damián Zepeda.
No solo es un perdedor, también un buitre del presupuesto.
Los escándalos por corrupción en los que se ha visto involucrado Marko Cortés son diversos.
Destaca el presuntamente haber pedido 70 mdp en moches cuando consiguió recursos y haber cobrado 105 mil pesos en el Congreso de la Unión sin devengarlos.
También Cortés utilizó una placa tapada para evitar infracciones viales y malversó recursos de programas federales.
Cortés llega tan débil que un personaje como AMLO se lo devorará como un postre.