Los fracasos constantes del gobierno de Andrés Manuel López Obrador han sido tratados de ocultar con el caso del corrupto ex director de Pemex, Emilio Lozoya Austin.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador va a proteger, cuidar y ayudar al ex empleado de Enrique Peña Nieto, porque lo utilizará para publicitarse durante un buen tiempo ante los fracasos que ha acumulado.
Por cierto: el amparo que tanto presume el equipo del corrupto Lozoya, tiene que ver con la denuncia penal electoral que lo involucraba en la campaña de Peña Nieto ante presuntos sobornos que había recibido. Nada más.
Lo de Altos Hornos de México y de Odebrecht son temas diferentes que el gobierno de AMLO podría perdonarle solo para obtener información muy confidencial.
Los nervios de varios políticos están a la orden del día, tanto que Carlos Salinas de Gortari tramita su ciudadanía en España, en donde tiene fuertes nexos con los reyes y con altos funcionarios de ese gobierno, además de la clase empresarial.
Enrique Peña Nieto también está más que preocupado, porque sabe que lo culparán por haber abandonado al hijo de su empleado del mismo nombre.