Horas después de que Martha Erika Alonso de Moreno Valle rindiera protesta como gobernadora espuria de Puebla, la Secretaría de la Marina abandonó la entidad poblana.
Y es que el titular de la SEMAR en Puebla, dejó entrever que Martha Erika dejaría crecer el robo de combustible que protegía su esposo Rafael.
De hecho desde oficinas centrales Martha Erika no generaba confianza.
Y por eso 90 miembros de la SEMAR abandonaron Puebla, lo que de inmediato se sintió porque el hampa entró de vacaciones.
Hoy a Martha Erika ya no le podemos reclamar, pero sí al puñado de cómplices que lloran porque se les fueron negocios y privilegios al amparo del poder.