Al negar que la explosión de una toma clandestina en Palmar de Bravo haya sido ocasionada como represalia del crimen organizado, el secretario general de Gobierno, Diódoro Carrasco Altamirano, solicitó a la PGR actuar expeditamente en el tema y atrapar a los huachicoleros.
En entrevista, consideró que la Procuraduría General de la República debe acelerar las investigaciones, atrapar a los delincuentes y terminar con esta problemática.
Luego de que la dependencia federal reportó 22 casos y solo una sentencia, Diódoro Carrasco le solicitó a la dependencia actúe con mayor celeridad, porque se crea un sentimiento de impunidad ante delincuentes que fueron identificados, que hay una orden de aprehensión sobre ellos y por los protocolos de la nueva ley, salen libres.
Nuevamente aclaró que no fue un ataque al arco de seguridad y un incendio intencional a la toma clandestina que se perpetró la madrugada de miércoles.
"Se ha convertido en un negocio atractivo para el crimen organizado, y en Puebla la estrategia para combatirlo es el trabajo coordinado entre el Estado con la PGR, Pemex y Sedena", explicó.
Opinó que para luchar frontalmente con la delincuencia organizada se requiere de más inversión y logística, además sostuvo que el crimen organizado contamina y hace cómplice a los habitantes de las poblaciones aledañas de donde se comete el delito, y genera conflictos.