Como cada año, más de 30 mil poblanos presenciaron el tradicional desfile del 5 de mayo, en esta ocasión el número 155.
Desde la noche anterior, las familias se coordinaron para llegar a las gradas o a las sillas que fueron destinadas para presenciar el desfile cívico-militar.
Los asistentes señalaron que este evento es el más representativo para los poblanos, donde disfrutan de los carros alegóricos, las bandas de música y los vehículos militares.
La mayoría llegó desde 4 de la mañana para apartar los lugares de los integrantes de la familia que lo vienen haciendo desde hace al menos 23 años.
Para ellos, llegar con varias horas de anticipación a ocupar una grada, pues al final para ella valió la pena.
Parte de la tradición fue la verbena que se desarrolló a lo largo del recorrido.
Desde temprano comerciantes ofertaron tamales, champurrados, tortas, cemitas, frituras, aguas y regresos.
Otros, gorras, pelucas, lentes para el sol, sombreros, entre otros aditamentos para poder cubrirse.
Los que no perdieron el tiempo fueron los vivales que trataron de hacer su agosto.
Aunque el gobierno del estado instaló sillas y gradas gratis, algunos líderes de comerciantes trataron de rentar los espacios hasta en 100 pesos por persona.
Esto generó inconformidad para los poblanos que llegaban una hora antes del desfile e intentaban sentarse, pues se negaron a otorgarles los espacios que apartaban.
Tras las denuncias, el secretario de Gobernación Municipal, José Rodríguez Verdín encabezó un operativo para detectar está renta irregular.
Indicó que producto de los recorridos se identificó a una persona que trató de cobrar sillas que eran de su propiedad y se procedió al decomiso de 15 que quedaron bajo resguardo del personal de la dependencia.
En el trayecto, dentro de las medidas de seguridad y atención de personas, la delegación de la Cruz Roja estableció bases alternas para brindar auxilio a lo largo del recorrido.
Al respecto, Alberto Ramírez Mauleón, coordinador de Auxilio resaltó que para este operativo se destinaron 6 ambulancias, un camión de rescate urbano y personal a pie.
Destacó que durante el desfile se atienden problemas como insolaciones, golpes de calor, debilidad por falta de alimentos y baja de glucosa.
Al final, se unieron a las medidas de seguridad personal de protección civil, SUMA, bomberos, policías y militares.
