Un peculiar personaje opera para convertirse en el Gobernador Interino: José Juan Espinosa Torres, aliado, fanático, cómplice, operador y hasta hijo político del ex mandatario Rafael Moreno Valle.
El trágico día que ocurrieron los hechos, José Juan Espinosa hizo públicas sus condolencias y hasta lloró.
Hay quienes interpretan que las lágrimas del JJ no solo fueron por la tragedia, sino porque se le acabó la fuente de recursos y la gran exposición mediática que Martha Erika le daba.
Nadie puede escaparse de su pasado y menos quien tiene una fortuna envidiable hecha al amparo del morenovallismo.
El JJ quiere ser gobernador interino no para tejer y consolidar el proyecto de Morena, sino para saciar y encumbrar sus ambiciones personales
Por cierto: A dos semanas de la tragedia en donde perdieron la vida los ex gobernadores Martha Erika Alonso y Rafael Moreno Valle, me asqueo como ser humano por la forma en que varios buitres se preparan para lanzarse y apoderarse del vacío de poder político que se siente.
Pero me queda claro que en política gana quien menos gestos haga al oler la pos.
Por supuesto que el gobernador interino será puesto solo por los legisladores de Morena y lo que queda del grupo en el poder. Nada más.
Que no se hagan falsas ilusiones quienes mandan a sus emisarios de Cuarta.