Jueves, 04 Abril 2019 13:09

Roberto Moya paga campaña negra contra Morena

Escrito por Fabián Gómez

De acuerdo al periodista Fermín García, el Senador suplente Roberto Moya, financía la campaña negra contra Morena y su candidato a la gubernatura de Puebla

Moya llegó al Senado tras la muerte de Rafael Moreno Valle y antes fue secretario de Finanzas en el gobierno morenovallista.

A continuación el escrito completo del periodista:

"A que en ambos bloques se han percatado que, si no es por medio de la guerra sucia, no hay manera de minar el alto grado de popularidad de Morena y su candidato. Ya que los rivales de Barbosa, el priista Alberto Jiménez Merino y aspirante del panismo Enrique Cárdenas Sánchez, no están dispuestos ni tienen el carácter para hacer una campaña de confrontación visceral con el abanderado de la coalición Juntos Haremos Historia.

Cárdenas enfrenta el problema de que no acaba de ser aceptado por importantes núcleos de militantes del PAN y el PRD.

Mientras que Jiménez Merino arrancó su campaña con una alta carga de vulnerabilidad al estar estrechamente relacionada su candidatura con el exgobernador Mario Marín Torres, quien es uno de los personajes con mayor rechazo en la opinión pública nacional.

Una segunda situación es que no prosperó la rebelión del senador Alejandro Armenta Mier, quien buscaba reventar el proceso interno de Morena por el cual se seleccionó al candidato a la gubernatura.

Armenta aspiraba a ser el agente catalizador entre dos fuerzas contrarias a Barbosa: el morenovallismo y el grupo de Ricardo Monreal, quien en su afán de disputarle el control nacional de Morena a Yeidckol Polevnsky, le ha apostado a desestabilizar el proceso electoral de Puebla.

El problema de Armenta es que su malestar no avanzó en las vías legales y ahora se han invertido los papeles, de ser el golpeador en el proceso interno de Morena, pasó a estar en una actitud defensiva por la supuesta vinculación que tendría con José Christian N, alías “El Grillo”, quien en menos de una semana, se ha convertido en el presunto criminal más buscado de Puebla por encabezar una supuesta red de narcomenudeo y de ejecuciones de rivales en una serie de negocios ilícitos que tenían su base de operación el mercado Morelos de la capital poblana.

El senador Armenta se defiende diciendo que él no controló la presencia de “El Grillo” en algunos de sus actos públicos, pero las imágenes que muestran al supuesto criminal cerca del legislador son más elocuentes que los intentos de deslindarse del presunto líder del narcomenudeo del mercado Morelos.

La tercera circunstancia es que ambos bloques saben que no hay condiciones para derrotar al movimiento lopezobradorista de Puebla y su candidato a la gubernatura, pero si necesitan provocar espacios de negociación, de apertura para sus intereses personales.

A los morenovallistas les urge abrir algún canal de presión para no perder los jugosos negocios que se amasaron en el sexenio de Rafael Moreno Valle Rosas, como son: la concesión del agua potable en la capital; los contratos por varios lustros para dotar de mobiliario a oficinas públicas, de alumbrado a varios municipios o de administrar mediante fideicomisos algunos impuestos que sirven para pagar pasivos a largo plazo; o todo lo que tiene que ver con el pago de obras públicas, cuyos costos se inflaron hasta en un 500 por ciento.

Del lado de Ricardo Monreal, le urge encontrar apoyos en su guerra contra Yeidckol Polevnsky, cuyo mandato concluye a finales del año. Sabe que Luis Miguel Barbosa es muy leal a la presidente de Morena, pero Monreal quiere negociar que se le permita llegar a la presidencia nacional de este partido.

El ala económica del morenovallismo es lo único que sobrevive del grupo político del extinto exgobernador Rafael Moreno Valle Rosas. Es encabezada por el senador Roberto Moya Clemente y el exsecretario de Salud, Jorge Aguilar Chedraui. El segundo de ellos es quien siempre administró los fondos de operación política de esa facción. Un asunto que es de dominio público, aunque él lo niegue.

Como parte de sus propósito, los morenovallistas están atrás de dos personajes: Javier Lozano Alarcón y Enrique Doger Guerrero, quienes han irrumpido en el proceso electoral contra Barbosa, sin tener el respaldo de un partido político y enfrentando una crisis de imagen pública. Los están usando como “kamikazes” contra el candidato de Morena. Los dos no tienen nada que perder si fracasan en sus propósitos. Los dos ya son políticos venidos a menos.

Y por el lado de Monreal, ha aparecido el senador suplente Alejandro Rojas Díaz Durán, que sin tener intereses en Puebla, quiere aparecer como el inquisidor de Barbosa, acusándolo de supuestos escándalos inmobiliarios.

Todo esto es apenas el inicio de la guerra sucia. Hasta ahora no se percibe que tales campañas socaven los índices de intención del voto. Habrá que ver la capacidad de Barbosa para sortear las tempestades".

Visto 1808 veces
Encubre el Poder Judicial al notario 46
“CONSUMIR DROGAS DAÑARÁ TU SALUD Y TU VIDA”
¡Otra vez en Puebla! golpean a vigilante en su primer día de trabajo
ataque de tiburón a bañistas en playa de Texas
contraparte.mx
© contraparte.mx | 2024
Calle Orión No. 13 Interior 7 Fracc. Villa Satélite La Calera, Puebla, Pue. CP 72564 Tel. (222)2-16-00-51. Todos los derechos reservados, Contraparte Informativa y Periodística S.A. de C.V, de no existir previa autorización, queda expresamente prohibida la publicación, edición y cualquier uso de los contenidos de este portal.