Parte de ser líder de un país es delegar responsabilidades y en congruencia con su discurso de“no ser candil de la calle y obscuridad en la casa”, AMLO prefiere atender los asuntos nacionales y dejar todo en manos de Ebrard y Urzúa, el primero se encuentra en Estados Unidos por el tema de llegar a acuerdos por las últimas medidas anunciadas por Trump, el segundo ha estado envuelto en los temas de distribución de recursos en el sector de salud pública.
López Obrador también enviará un escrito sobre la desigualdad en el mundo, ya que él cree que esto es causa del deterioro del medio ambiente, la inseguridad, la violencia y temas de migración.
