Dos son los personajes que quieren contaminar la conformación del gabinete del gobernador Miguel Barbosa.
En los últimos días, Ignacio Mier y su empleado, el amigo de los Moreno Valle, Arturo Rueda, se han dedicado a filtrar nombres de personajes que podrían ocupar diversas carteras en el gobierno de Barbosa.
Tienen un objetivo principal: que Mier se logre colocar en una posición de primer nivel para tratar de construir un proyecto político personal, mezquino, como es su personalidad.
Sueñan con la gubernatura de Puebla. No se rían, no es chiste.
Sin embargo miles son las víctimas y agraviados de estos vivales, uno de ellos extorsionador (Rueda) y el otro su jefe.
Y es aquí en donde el gobernador electo Miguel Barbosa no tiene por qué cargar con esas miles de víctimas a las que han calumniado desde hace años el extorsionador Rueda y su jefe Mier.
Barbosa ha entablado excelente relación con todos los líderes políticos, empresariales, religiosos, laborales y medios de comunicación, entre otros.
La bajeza más reciente de ambos es querer llegar a la Secretaría General de Gobierno a través de rumores e intrigas.
Pero el trabajo de Fernando Manzanilla es implacable, eficiente, ordenado y ha logrado que haya gobernabilidad en la entidad.
Para tener un panorama más claro de quiénes son el tal Rueda y Mier, basta recordar que el primero fue grabado cuando extorsionaba en su propia casa a Jorge Estefan al pedirle 10 mdp para no publicar unas grabaciones.
En ese entonces, Ignacio Mier en su calidad de presidente del periódico Cambio, no solo sostuvo en su cargo al extorsionador, sino se convirtió en cómplice al solaparle una conducta delictiva al pseudo periodista quien se decía amigo íntimo de Martha Erika Alonso.
Así esta ambiciosa pareja llena de Mier...