Hasta hace un año, antes de la llegada de la Cuarta Transformación, el 90 por ciento de los sindicatos en el país funcionaban con Contratos Colectivos de Protección, dentro de sus contratos colectivos de trabajo (CCT), pues había tres mil 347 agrupaciones gremiales, 47 confederaciones o centrales obreras; 532 federaciones y 2768 organizaciones sindicales.
Lo anterior –dijo-, va a cambiar con la llegada al gobierno de la Cuarta Transformación, donde los trabajos que se llevan a cabo para impulsar la Reforma Laboral, busca, entre otras cosas, mejorar la calidad de los trabajadores y eso significa mejorar el poder adquisitivo de los mismos.
Durante la conferencia sobre la reforma laboral, en la Universidad Tecnológica de Tecamachalco, el secretario de Trabajo, Abelardo Cuéllar sostuvo que ese porcentaje de sindicatos blancos (los cuales obedecen más a su patrón) se tienen que revertir, pero advirtió que la clase obrera debe estar informada y conocer sus derechos laborales como el principio del nuevo viraje sindicalista.
Expresó que nunca a nivel laboral se buscó que la base trabajadora tuviera certeza de una mejor vida.
En el foro con más de 200 personas, el secretario sostuvo que otro agravio común, por parte de los sindicatos blancos, es que los dirigentes, amigos y familiares tenían jubilaciones millonarias, y además de que en un gran número de las instituciones había en nómina personas que cobraban sin trabajar, en agravio de quienes sí cumplían con su responsabilidad, y paradójicamente se jubilaban apenas con la cuarta parte de sus ingresos en su vida activa.