La presidenta municipal de Puebla Claudia Rivera, debe poner un alto al matrimonio formado por Celina Peña y Mario Martell, directora de Turismo Municipal y Director de Comunicación de su gobierno.
Y es que esa pareja habla, amenaza, promete y grilla en nombre de la propia Claudia Rivera, a quien -juran-, ayudaron y les debe la misma alcaldía.
La torpeza y desacato de Celina Peña fue exhibida ayer al utilizar un grupo de Whats App para promocionar en horario laboral al académico de la BUAP Humberto Morales Moreno, para que ocupara la gubernatura interina.
Fatal error de una funcionaria a quien no le importa los llamados de unidad, mesura y respeto de su jefa la alcaldesa.
La otrora pareja crítica del sistema, Celina y Mario, enfrentan conflictos de intereses muy obvios: promocionan a un académico porque ellos dan clases en esa institución.
Y también utilizan su medio de comunicación llamado Multitud para atacar y defender a quienes consideran aliados y detractores.
Y es ahí en donde hay un nuevo conflicto de intereses, porque ella es funcionaria municipal y se presenta como la mandamás en su pasquín.
Eso sí: Celina y Mario hacen cuentas para repartirse con medios de comunicación sin influencia algunos convenios publicitarios.
Y el suyo, Multitud, cobrará muy caro el haber llevado al triunfo a Rivera.