Por José Carlos Sánchez
El gobernador de Puebla, Alejandro Armenta, descalificó las críticas del senador del PRI, Néstor Camarillo, quien criticó la estrategia de seguridad tanto del gobierno Federal como del Estado de Puebla.
Al ser entrevistado, señaló que el problema de inseguridad no puede solucionarse con mandos militares al frente.
Por otra parte, el gobernador de Puebla se limitó a enunciar cifras que a modo de respuesta, sirvieron para mandarles un mensaje a los integrantes de la oposición, incluso para viejos correligionarios. Entre las cifras el titular del Ejecutivo poblano destacó que del 14 de diciembre al 16 de febrero hubo 586 detenciones, 133 vehículos asegurados de los cuales 35 entraban en materia de robo de hidrocarburos, 297 vehículos recurados con reporte de robo, 13 tomas clandestinas inhabilitadas, 6800 litros de gasolina asegurada, 31700 litros de gas, más de 16 mil gramos de cannabis, más de mil dosis de cristal, más de 30 armas de fuego y mas de mil cartuchos asegurados. Además de 39 mesas de seguridad celebradas, algunas con autoridades de los vecinos estados de Tlaxcala, Oaxaca y Morelos.
“Creamos la guardia forestal y la policía forestal, hemos tenido más de 40 incendios que hoy no son nota porque no se volvieron tragedia”, aseguró también el gobernador poblano.
Además de referir de las detenciones y cateos en otros municipios como Chignahuapan, Huauchinango, Tlahuapan y Cuautlancingo se reafirmó la estrategia nacional de atención a las causas primarias de la inseguridad y su combate por medio de la educación y el deporte.
En lo que respecta a Camarillo, el gobernador se limitó a recordar el municipio del que es originario el senador de la oposición: Quecholac, uno de los más célebres por su problema de huachicol e inseguridad derivado de tomas clandestinas. “Con eso les digo todo, ¿para que contesto?”, resumió.