Según ha estado informando el diario New York Post, el gigante japonés Sony estaría sopesando la posibilidad de desprenderse de sus filiales de cine y televisión, razón por las cuales estaría escuchando tasaciones por parte de bancos y hace unos días, el presidente de Sony Entertainment, Michael Lynton habría abandonado la compañía.
Tal y como informa el periódico, la empresa querría quedarse con su filial musical, puesto que no tiene pérdidas, pero está abierta a vender la audiovisual, ya que durante 2016 solamente ha conseguido un 8% de la taquilla mundial.
El movimiento habría despertado el interés de CBS y varios grupos chinos, aunque Sony tampoco tiene prisa y estaría esperando a tomar una decisión en firme a ver cómo se comporta el estreno de Emoji: La Película, que llegará a los cines el próximo agosto y en la que la empresa japonesa ha depositado grandes esperanzas.