El profesionalismo secó al Barça femenino de títulos. Desde que dejaron el amateurismo, en la temporada 2015-2016, las jugadoras azulgrana solo consiguieron levantar la Copa de la Reina la campaña pasada.
Perdido el liderazgo en España y con Europa como desafío, el Barça agitó el femenino. Incorporó un director deportivo a su organigrama (Markel Zubizarreta, hijo de Andoni), cambió de entrenador (Fran Sánchez reemplazó a Xavi Llorens) y reforzó, como nunca, la plantilla. Llegaron seis jugadoras nuevas: Bussaglia (Wolfsburgo), Andonova (PSG), Toni Duggan (Manchester City), Fabiana Baiana (Corinthians), Martens (Rosengard) y Mapi (Atlético de Madrid).
No especuló el Barcelona. Fichó a la considerada por la UEFA como la mejor jugadora de Europa, Martens e hizo lo nunca visto en España, pagó por un traspaso en la Liga Iberdrola: Mapi llegó a cambio de 50.000 euros.
“Estas incorporaciones nos ayudarán a dar un salto de calidad en la plantilla”, subraya el técnico azulgrana.
No se equivocó Fran Sánchez, el Barça está intratable en la Liga Iberdrola: ganó los cuatro partidos que jugó, marcó 23 goles y no concedió ninguno. “Esto no nos tiene que llevar a la relajación y a pensar que los partidos son fáciles.
Tenemos que ir con una concentración máxima”, recuerda el preparador. Recuperada la supremacía en España, ahora el Barcelona empieza su camino en la Champions frente al Avaldsnes de Noruega (18.00 horas, BarçaTV).
Con información de : EL PAÍS
