Los gobiernos estatales podrían cancelar la ejecución de centenares de obras millonarias que fueron licitadas y ganadas por empresarios del sector de la construcción.

 

El motivo: el gobierno de Enrique Peña Nieto no les ha enviado los recursos etiquetados para las mismas por falta de fondos.

 

Con ello, el gobierno Federal da una clara muestra de la opacidad en el manejo de los recursos y de su desinterés por acercar beneficios y servicios a los mexicanos.

 

Puebla no es la excepción y están literalmente detenidas todas las obras que iniciaron hace meses y tienen participaciones federales.

 

La culpa es del gobierno Federal, el cual ha pedido a los constructores que le fíen las obras al mismo precio que marca la licitación correspondiente.

 

Y es que la dependencia de Luis Videgaray, secretario de Hacienda, no tiene fecha para pagar los anticipos, pues lo más importante para este funcionario es seguir promoviéndose para buscar la Presidencia de México.

 

Hay quienes piensan que  Hacienda enviará el recurso a finales de mes y exigirá que se gaste antes del 15 de Octubre, o de lo contrario le tendrán que regresar por ley lo que no hayan gastado.

 

Lo que pretende Hacienda, es hacerse de recursos para enfrentar la crisis en la que nos tiene.

 

De ese tamaño es quien quiere ser el sucesor de Peña Nieto, el mismo que está en contra del desarrollo de México.

 

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