En esta magnífica obra, Maquiavelo explica cómo se debe obtener, defender y mantener el poder, aunque para ello se tengan que cometer crueldades como las hechas por Nora.
Hoy Nora Merino se aferra a la coordinación de los diputados del PT en el Congreso de Puebla, porque busca supervivencia y vigencia política para negociar con el gobernador Sergio Céspedes, a quien antes grillaba.
Y esa coordinación de los diputados del PT le corresponde al diputado Antonio López, quien recibió una puñalada por la espalda de la misma Nora, quien se niega a dejarle el puesto de quinto nivel. Hasta eso pelea Nora.
Nadie olvida cuando Nora intentó ayudar al delincuente Arturo Rueda Sánchez de la Vega, a quien le intentó conseguir un certificado falso de COVID para dejar la cárcel y estar en un hospital.
Rueda está preso en el penal de Tepexi de Rodríguez por los delitos de extorsión, uso de recursos de procedencia ilícita, evasión fiscal y delincuencia organizada. Nada más.
Tras su accidentada aparición como diputada del montón por el PES,
Nora Merino encontró un lugar en el Partido del Trabajo (PT) al desaparecer el registro del Partido Encuentro Social (PES), su reelección en el Congreso derivó de este chapulineo y no por sus resultado en el legislativo, a pesar de ser la primera presidenta del Congreso, gracias a su relación con Biestro, no consiguió siquiera estar entre los primeros legisladores con más iniciativas aprobadas.
PD si Sergio Céspedes quiere obtener una definición precisa de Nora, simplemente que le pregunte a la señora Rosario, viuda de Barbosa o que lea a Maquiavelo.