Varias observaciones vale la pena realizar tras la renuncia del Secretario de Gobernación Fernando Manzanilla, al gobierno de Miguel Barbosa.
En primer lugar que la estabilidad y gobernabilidad de Puebla están garantizadas por el gobierno de Miguel Barbosa.
En segundo lugar que personajes como Eukid Castañón Herrera, aprovecharán esta coyuntura para reclutar a sus otrora empleados y aliados.
Y además de Eukid, varios personajes de bajo nivel saldrán a buscar reflectores porque ven una excelente oportunidad tras la salida de Manzanilla.
Otro tema importante es que el propio Manzanas dejó entrever que regresará a hacer política en clara alusión al proyecto político que tejió desde la Segob.
Las diferencias entre el mandatario Barbosa y Manzanilla quedaron atrás... por el momento.
Se reduce la burbuja barbosista fiel a la causa de la 4T.
Hoy el mandamás en la Segob es David Méndez, quien goza de la absoluta confianza del mandatario Barbosa.
También es importante resaltar que algunos personajes nocivos se quedaron con las ganas de llegar a saquear al gobierno de Puebla porque afortunadamente el mandatario Barbosa los conoce a la perfección.
No les dio la Segob por su negro pasado y corrupción desmedida.
Los dados están echados y el gobernador Barbosa tiene plenamente identificados a grupos y aliados que tendrá para enfrentar a sus detractores.
Barbosa ha hecho una tarea titánica al desmembrar la corrupción de 80 años del PRIAN y eso es de admirarse.