Un tema que jamás podrá explicar el casi candidato del PRI a la Presidencia de México, José Antonio Meade Kuribreña, es el relacionado a los millones de mexicanos en extrema pobreza.
Y es que él, no ha podido hacer gran cosa desde los altos cargos que ha ocupado, para mejorar las condiciones de vida de más de 100 millones de mexicanos a los que les regateará el voto.
Sin lugar a dudas el casi candidato del PRI es un tipo con gran experiencia, pero de nada ha servido para -repito-, evitar el hambre que hay en el país que quiere gobernar.
Meade es un excelente tecnócrata pero será un pésimo candidato. Es el menos peor.
Por lo pronto, la maquinaria priista ya comenzó a andar como en los viejos tiempos.
Por otra parte, nos esperan tiempos difíciles o impredecibles con la designación de José Antonio González Anaya como titular de Hacienda.
Y es que este personaje no logró aumentar los positivos en Pemex, al grado de caer las exportaciones y ser el encargado de dirigir los gasolinazos.
Por cierto: González Anaya es concuño de Carlos Salinas de Gortari.
Por si alguien daba por muerto a Salinas, hoy está más vivo que nunca.
Qué bonita familia!!!!!!.