Aurelia Navarro Niño

El ex alcalde de la Ciudad, Eduardo Rivera Pérez responsable de la crisis de baches, heredar un déficit financiero superior a los 500 millones de pesos y obras millonarias de pésima calidad en el municipio de Puebla, reapareció en la asamblea donde el PAN eligió a su dirigente municipal.

A Rivera Pérez se le vio junto a la actual regidora de oposición, Lupita Arrubarrena, pero no cerca de quien fue su fiel, Adán Domínguez, durante la administración que abandonó para ir por sus intereses de competir por la gubernatura de Puebla, la cual perdió en el 2024.

El panista es investigado por presuntas irregularidades en el mantenimiento realizado a la avenida Juárez durante su administración, luego de que las recientes lluvias provocaron severas afectaciones en dicha vialidad, una de las más emblemáticas de la capital.

De acuerdo con información de la Auditoría Superior del Estado (ASE), ya se recibió la documentación relacionada con las obras ejecutadas durante el gobierno de Rivera Pérez, la cual forma parte del proceso de revisión para determinar si existieron anomalías en la aplicación de recursos públicos.

El caso también alcanza a Adán Domínguez Sánchez, quien fungió como suplente de Rivera en la presidencia municipal, y que estaría implicado en las irregularidades detectadas en la rehabilitación de la avenida.

Con esta investigación, se abre un nuevo capítulo de cuestionamientos hacia las administraciones panistas en Puebla, en medio de un contexto en el que el partido busca mantener presencia política rumbo a los próximos procesos electorales.