Este domingo, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que en la administración pasada se toleraba el robo de combustibles al punto que formaba parte de la contabilidad del gobierno, y que los huachicoleros crearon un “Pemex bis” con las tomas ilegales y las pipas.
De gira por Acayucan, Veracruz, para presentar el programa Sembrando Vida, insistió en que este negocio ilícito ya se terminó y que “no acepta intimidaciones de nadie”. En el campo de beisbol del municipio destacó que se decidió actuar por ética y por el daño al erario.
“(Los huahicoleros) tenían tomas clandestinas, tenían hasta pipas para la distribución. Era como otro Pemex, un Pemex bis, y se toleró ese ilícito… Habrá trabajo, bienestar, pero a los del negocio, a los de arriba, se les acabó”, subrayó.
El mandatario federal dijo que su gobierno tiene consideraciones para la gente que tenía que robar combustible por necesidad, pero que con los nuevos apoyos ya no tendrán necesidad de hacerlo.
Durante su discurso, López Obrador también resaltó que se está limpiando el gobierno desde arriba, aunque reconoció que aún “puede haber malandrines abajo”.
Recordó que el robo de combustible implicó el año pasado pérdidas por 65 mil millones de pesos, pero “dije basta, se acaba el huachicol arriba y abajo”.