The Daily Digest
La posibilidad de que Nicolás Maduro abandone Venezuela como parte de una transición política ha dejado de ser un escenario meramente teórico para instalarse en el debate regional. Según informó CNN, el Gobierno de Gustavo Petro contempla la opción de que Colombia reciba al presidente venezolano si este sale del país en un contexto de cambio de poder. La propuesta surge en un momento de máxima tensión entre Caracas y Washington.
La idea de un exilio de Nicolás Maduro en Colombia no fue planteada directamente por Petro, sino por su canciller, Rosa Yolanda Villavicencio, quien habló sobre esta cuestión en una entrevista con el medio colombiano Caracol. “En el momento de tensión que existe”, dijo refiriéndose a las diferencias entre Estados Unidos y Venezuela, “hay que negociar, y seguramente, si Estados Unidos exige una transición o un cambio, es una cosa (la posible salida de Venezuela) que ellos deben valorar”.
“Si esa salida implica que él”, dijo Villavicencio sobre Nicolás Maduro sin decir su nombre, “deba vivir en otro país o pedir la protección, Colombia no tendría por qué decirle que no”.
La declaración no plantea un respaldo político al chavismo, sino una salida pragmática en un escenario de negociación. Según la canciller, ofrecer protección no sería un gesto ideológico, sino una forma de facilitar una transición y reducir el riesgo de una escalada mayor en la región.
Petro y la idea de una transición democrática
Un día antes de las declaraciones de su canciller, el propio Gustavo Petro había elevado el tono con un mensaje dirigido al Gobierno venezolano. En su cuenta de X, afirmó que Venezuela necesita una “revolución democrática” y reclamó abiertamente un “gobierno de transición”. Para Petro, la respuesta a las amenazas externas no puede ser militar.
“El Gobierno de Maduro debe entender que la respuesta a una agresión externa no es solo un alistamiento militar sino una revolución democrática”, escribió el presidente colombiano. Y añadió: “Es con más democracia como se defiende un país no con más represiones ineficientes”. En otro mensaje, fue más lejos al pedir “una amnistía general y un gobierno de transición con la inclusión de todos y de todas”.
Estados Unidos, presión y escenarios de una posible salida
Estados Unidos lleva meses aumentando la presión sobre Venezuela, con el despliegue de miles de tropas y un grupo de ataque de portaaviones en el Caribe, además de amenazas reiteradas del presidente Trump contra Maduro.
Fuentes citadas por la cadena señalaron que la administración Trump trabaja en planes para el día después en caso de que Maduro sea expulsado de Venezuela. Estos planes contemplan distintos escenarios: una salida voluntaria negociada, un vacío de poder que deba ser llenado por EE.UU. o incluso un desenlace tras ataques estadounidenses a objetivos dentro de Venezuela.
En ese marco, Trump habló por teléfono con Maduro a finales del pasado mes de noviembre. Según un alto funcionario de la Casa Blanca, el presidente estadounidense le dio a su homólogo una especie de ultimátum, sugiriéndole que le convenía abandonar el país y advirtiéndole de su intención de seguir destruyendo barcos.
Maduro, por su parte, describió la conversación como respetuosa y “cordial”, aunque evitó entrar en detalles. “Si esa llamada significa que se están dando pasos hacia un diálogo respetuoso de Estado a Estado… entonces bienvenido el diálogo”, dijo tal y como recoge CNN.
Así, la oferta implícita de Colombia aparece como una pieza más en un tablero geopolítico extremadamente frágil, donde la transición, el exilio y la negociación se cruzan como posibles salidas a una crisis que amenaza con desbordar a toda la región.

