El Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador ha declarado una guerra inevitable en contra de los llamados “Huachicoleros”, esto después de descubrir que la Red de Robo de Hidrocarburos se encuentra dentro de la misma empresa de Petróleos Mexicanos.
En México, el delito de huachicol aumentó de manera intratable a tal grado que se tuvieron pérdidas por más de 147 mil millones de pesos y alza en el robo de combustibles en un 30%, cifras que han lastimado las finanzas dentro de PEMEX.
Desde el sexenio de Fox, Calderón y Peña Nieto, el robo de hidrocarburos se ha convertido en un delito en aumento, del cual tenían conocimiento los altos funcionarios y Ex Directores de Pemex, pero nunca hicieron nada, al contrario, callaron dicho delito y en complicidad con los mandos logísticos y red interna de la empresa, robaban 58,100 barriles de combustible diarios.
Ex Directores de Pemex como Jesús Reyes Heroles, Juan José Suárez Coppel, Raúl Muñoz Leos y Emilio Lozoya recibieron miles de millones de dólares en sobornos y a cambio, dieron concesiones a diestra y siniestra a empresarios, compadres y políticos para dejar en bancarrota y cobrarnos a los ciudadanos las deudas de los funcionarios.
Es por ello, que López Obrador ha puesto en marcha un Plan perfecto para desmantelar a los Huachicoleros de cuello blanco, aquéllos encargados de hundir al país en la delincuencia, la corrupción y la impunidad por los grupos que pelean los combustibles.
El Presidente tendrá un reto enorme, el de combatir a peces gordos de Pemex, a líderes sindicales, barrer con los de arriba y abajo, no perdonará estos actos, sin duda alguna, Obrador puso el dedo sobre la llaga y luchará por erradicar la delincuencia voraz en una empresa manchada por el delito.