Ciudad de México. Con un concierto en el Museo Panteón de San Fernando, el grupo de etnofusión Ixachilanka dio a conocer sus primeros trabajos discográficos, titulados Sangre Ancestral y Memoria Ancestral, en los que combina canciones contemporáneas como “Cielito lindo”, “La Llorona”, “Bésame mucho” y “El feo” con cantos tradicionales en lenguas como maya, náhuatl y zapoteca.
Liderado por la voz de Érika Valero Leyva, Tlazohtiani -que en náhuatl significa la que ama-, el quinteto, también integrado por Juan Carlos Ramírez (percusiones), Gerson Rojas (batería), Andrés Sánchez (bajo) y Juan Carlos López Macías Makuilxochitl (guitarra), interpretó temas de su propuesta, resultado de muchos años de investigación, trabajo y experimentación con la riqueza de los instrumentos y tradiciones sonoras indoamericanas, prehispánicas y elementos rituales de diferentes etnias del continente americano, explicaron.