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Los candados de amor son una de las tradiciones que han tomado fuerza a nivel mundial, pues lo mismo pasa en París, Francia, como en lugares de México. Y Unotv.com te da los detalles de este peculiar rito con el que parejas sellan su sentimiento.

¿De dónde surgen los candados de amor?

Todas las parejas de enamorados buscan una manera de prometerse que su amor será duradero e indestructible, por ello, los candados de amor son tan populares. En ellos, los novios escriben su nombre o sus iniciales para luego cerrarlo y dejarlo atado a un puente.

La llave, según cuenta la leyenda, se arroja al mar para que nada pueda abrir el candado y, así, el amor dure para siempre.
Esta tradición ha tomado mucha fuerza entres los enamorados; y, se cree, que surgió varios años atrás. Cuando, según dicen, los jóvenes buscaron, además de prometerse amor eterno, también proteger su amor.

Sobre el surgimiento de esta romántica tradición poco se sabe y nada está del todo claro, pues, aunque unos afirman que se trató de una pareja de enamorados, otros más aseguran que, en realidad, era un cerrajero que impulsó la iniciativa para poder apoyar su negocio.

Lo cierto es que los enamorados encontraron en los candados de amor una manera más de jurarse lealtad con la esperanza de que su relación sea indestructible.

Los candados del amor que pusieron en jaque a París

En 2014, las autoridades de París, en Francia, pidieron a los enamorados que llegaban a la ciudad del amor que no utilizaran el Puente de las Artes y arrojar la llave al río Sena, pues comenzaba a ser un riego para la arquitectura.

Para aquellos años, las autoridades pidieron cambiar un poco la tradición: de candados a selfies. La propuesta llamaba a compartir la imagen en redes sociales con el hashtag #lovewithoutlocks (amor sin candados).
Durante años, miles de enamorados colgaron candados como símbolo de su amor en las rejas de varios puentes de París, hasta que en 2015 la ciudad decidió retirarlos por la “degradación del patrimonio” y el riesgo para la seguridad de los visitantes.

Finalmente, para 2017, las autoridades de París, Francia, anunciaron que los candados de amor retirados serían subastados con fines benéficos.