Lo anterior, durante la presentación en la BUAP de la Situación actual y emisiones recientes del Popocatépetl, explico que el aumento de la actividad el volcán es por la subida a la superficie de material subterráneo con gases que generó las explosiones y emisión de ceniza.

Detalló que, el volcán tiene ciclos de actividad de 100 años, de estos, el año con mayor actividad, fue una erupción registrada en 1663, cuando los documentos de la época detallan que la expulsión de gases y ceniza dejaron 3 días de oscuridad en la zona del volcán y hasta el área que hoy ocupa la ciudad de Puebla.

Explicó que éste es el escenario que se podría esperar si incrementa la actividad volcánica y resultara en una erupción, lo cual descartó de momento por la caída en la actividad volcánica.

Sobre la ceniza, mencionó que es producto del material profundo y antiguo que se acercó al cráter y cuando llega al domo explota y se sale expulsado como ceniza.

Señaló que los picos en las variaciones en las emisiones del volcán, desde 1994 a la fecha, han sido las de 1997 y 2019, periodos con gran emisión de ceniza pero columnas de humo más altas que en ocasiones anteriores.

Por ello, expresó que es muy peligroso acercarse al coloso por los fragmentos balísticos que está arrojando el volcán en un rango de hasta 10 kilómetros por lo que señalo la importancia de que la población respete la franja de 12 kilómetros al rededor del volcán.

Las muestras de la ceniza que se han analizado recientemente, exhiben que materiales profundos con más gas, están subiendo al cráter para ser expulsados, lo cual apuntó, es la causa de la actividad actual del Popocatépetl.

Finalmente informó que la intensión del Cupreder y las universidades, es colaborar con acciones en situaciones de riesgo que enfrenta la sociedad, además de buscar soluciones y propuestas de gestión de riesgo integral.