Sin miedo al nuevo Infierno, Jaguares salió con triunfo del Estadio Nemesio Diez y de paso exhibió a Toluca, que llegaba como líder general e invicto en el inicio de la liga.

Con un golazo de Jonathan Fabbro, Chiapas derrumbó esos factores que arrastraba previo y durante el duelo, desde el anuncio de la Liga MX de que su dueño Carlos López Chargoy debe vender al equipo hasta un jalón de Osvaldo González sobre Vanderley que no fue marcado por el árbitro Eduardo Basulto y que era un penalti para los del sureste.

Sergio Bueno, técnico de Chiapas, demostró que su plan de trabajar en las instalaciones de la Federación Mexicana de Futbol, en el corazón del Estado de México, prepararon al equipo para enfrentar la altura y resistir los 92 minutos del cotejo.

Una de esas opciones se generó cuando Enrique Esqueda, en una jugada individual fuera del área, ganó una falta.

Fabbro pidió el balón, se perfiló y mandó el esférico al ángulo izquierdo de la portería para anotar el 1-0 al 72’.

Contadas fueron las opciones de Toluca a lo largo del juego como el balón al travesaño tras disparo de Antonio Ríos en el primer tiempo, y luego un disparo de Efraín Velarde que tiró en el área y obligó a Moisés Muñoz a lanzarse para evitar el tanto.

A los problemas de Toluca se sumó la salida de Paulo da Silva al 67’, debido a una molestia en la parte posterior del muslo izquierdo y su lugar fue ocupado por Aaron Galindo.

Desde ese momento todavía hubo una opción más de Jaguares antes de replegarse a esperar la marea roja que insistió en busca el gol del empate, pero se quedó con las ganas antes sus aficionados, quienes por segundo juego consecutivo llenaron el remodelado inmueble.