El expresidente del Cruz Azul, Guillermo Álvarez Cuevas, ahora es buscado por las autoridades federales y de la CDMX, luego de que perdiera el amparo contra la orden de aprehensión que giró un juzgado de la Ciudad de México por el delito de administración fraudulenta por 2 mil 257 millones 411 mil pesos.
La juez María Dolores Nuñez Solorio, del juzgado cuarto de distrito de amparo en materia penal, le negó la “suspensión definitiva” en contra de la orden de aprehensión por administración fraudulenta, pese que había conseguido una “suspensión provisional” en los meses anteriores.
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En esa orden de aprehensión, girada por un juez de la Ciudad de México, debido al delito de administración fraudulenta, también estaba considerado Guillermo Robin Álvarez, hijo de Billy y quien ostentaba un puesto en el organigrama del club de futbol.
El paradero de Guillermo Álvarez Cuevas es desconocido desde que Iván Aarón Zeferín Rodríguez, juez de distrito Especializado en el Sistema Penal Acusatorio en el Estado de México, con residencia en Almoloya de Juárez (Altiplano), le giró una orden de aprehensión por lavado de dinero y participación en actividades con recursos de procedencia ilícita.
La Federación Mexicana de Futbol se ha negado a desconocer a Guillermo Álvarez Cuevas como presidente del Cruz Azul y los directivos han comentado que esperarán hasta que el caso tenga una solución definitiva. Por ahora, a La Máquina Celeste la representa Isaac Velasco ante la FMF, para cualquier trámite y el club es administrado por Jaime Ordiales, que es el director deportivo de los celestes.
Los Consejos de Administración y Vigilancia de la Cooperativa Cruz Azul, dirigidos por Víctor Manuel Velázquez y José Antonio Marín, tienen el control del equipo de futbol y han prometido que respetarán el proyecto que actualmente tiene a la institución peleando por las primeras posiciones de la Liga MX.
Con información de ESPN.
