BARCELONA -- La rotura muscular que sufrió Leo Messi en el partido frente al Atlético de Madrid y que le apartará de los terrenos de juego durante al menos tres semanas provocará la ausencia del delantero en los dos próximos compromisos de la selección argentina.
La albiceleste se enfrentará a Perú el 7 de octubre y a Paraguay cinco días después, en dos duelos en los que el combinado de Edgardo Bauza podría dar un paso de gigante en su búsqueda de un billete para el Mundial de Rusia. El seleccionador tenía clara la presencia de la Pulga en ambos compromisos, pero la lesión en el aductor del muslo derecho que sufrió el miércoles le dejarán fuera de sus planes con total seguridad.
DESCANSO Y RECUPERACIÓN
Messi deberá guardar reposo absoluto durante una semana y a partir de ahí empezará una recuperación que consistirá en trabajo con el fisioterapeuta durante al menos diez días tras los que, si la evolución es la esperada, empezará a trabajar en los campos de entrenamiento junto a sus compañeros.
Aunque los plazos no son fijos y estarán marcados por sus propias sensaciones físicas, se espera que Leo pudiera empezar a ejercitarse sobre el 8 de octubre para ir cogiendo el tono y confiando en que pudiera reaparecer, aunque no fuera durante todo el partido, el 15 de octubre en el Camp Nou frente al Deportivo de La Coruña.
El duelo de Liga frente al equipo gallego se disputará como antesala al choque de Champions frente al Manchester City en el Camp Nou, para el que se supone ya estará en plenas condiciones el crack argentino, por lo que, de momento, no podría asegurarse si jugaría o no frente al equipo gallego el sábado anterior.
De acuerdo con una información del diario Sport, es probable que en los próximos días se desplace a Barcelona Marcelo d’Andrea, fisioterapeuta de absoluta confianza de Messi y que le trataría paralelamente a los servicios médicos del club azulgrana.
De la misma forma, se espera que el Barcelona traslade a la AFA un informe médico en el que se especificará el alcance de la lesión y quedará clara la imposibilidad de que Leo esté en disposición de alinearse con la selección en estos dos próximos compromisos.