Keisuke Honda sacó a lucir su pulida pierna izquierda por primera vez en México. El japonés debutó en la Liga MX con el cuarto tanto de Pachuca sobre el Veracruz, en lo que fue el tanto más celebrado en el estadio Hidalgo.
El fichaje estelar de los Tuzos dio unos besos en su pierna más hábil, cuando daba sus primeros pasos en un campo del futbol mexicano, y el gesto pareció servirle, ya que 15 minutos después de haber ingresado tuvo su primer gran festejo en Pachuca.
Un contragolpe, que él mismo orquestó con un toque de primera intención en el que se quitó a su marca, le permitió enfilar sin rival enfrente (salvo el portero Melitón Hernández). El arquero de los Tiburones dio unos pasos al frente para reducir el ángulo, pero el zurdazo cruzado del asiático se coló junto al palo.