El presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez refirió que el adelanto de 160 millones de pesos de Banobras para el Fondo de Infraestructura Social Municipal (FISM), no representa una deuda, ya que es un anticipo de las participaciones que quedará liquidado antes de que acabe su administración.

Contestó a sus críticos de oposición que ellos están buscando la manera de trabajar y dar resultados a la ciudadanía, al referir que no quieren ser una administración de escaso desempeño como lo fue la administración de Claudia Rivera Vivanco.

“Los diputados lo aprobaron, para que todos los municipios que quisiéramos tener anticipaciones de recursos lo pudiéramos realizar, a cambio también de las propias participaciones que el municipio va a recibir en los años subsecuentes (…) Muy importante, no es una deuda, sino simplemente, es un anticipo, se maneja como un mecanismo de crédito porque hay que tramitarlo ante cualquier institución bancaria que pueda proporcionárselo al Gobierno Municipal”, dijo.

Rivera Pérez enfatizó que los recursos serán destinados para obra pública que se realizarán en las juntas auxiliares de Xonacatepec y Zacachimalpa, donde faltan acciones de impacto para sus habitantes.

“A nosotros sí nos interesa trabajar, hay otros, anteriormente que no hicieron nada. Pero nosotros sí estamos trabajando, entregando obras, atrayendo congresos nacionales e internacionales, estamos viendo que tenemos pésimas condiciones en calles, que en algunas colonias falta agua y otras necesidades que tienen que ser atendidas”, dijo.

Rivera Pérez enfatizó que miente aquel que opine que este recurso no es necesario, debido a qué hay muchas necesidades que atender.