Todos Santos y los Fieles Difuntos es la celebración que da la oportunidad para componer el tejido social, a través de la unión familiar, aseguró el obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Puebla, Felipe Pozos Lorenzini.
Entrevistado al termino de la misa dominical, el prelado puntualizó que es momento que la sociedad tome parte de este proceso, ya que es fundamental que los problemas que aquejan hoy día sean disueltos con la fortaleza y unión de las familias.
"Les invitamos a todos nuestros hermanos católicos poblanos (a) que en estos días que se acercan (…), construyan un poquito el tejido social”, expresó al momento de explicar que estas fechas son especiales, porque son días de encuentro de familia o con la familia.
“Que muchas familias se reúnen para pedir por nuestros fieles difuntos, tiene que ser una oportunidad para reconstruir el tejido social”.
Aunque reconoció que esa reconstrucción se dará no de la noche a la mañana, sino que a pequeños pasos de manera paulatina.
La mejor manera de que las familias pueden contribuir a esa reconstrucción del tejido social, explicó, se da sólo en tres pasos, el primero de ellos es dar las gracias a Dios por la unión y por compartir el pan y la sal para celebrar a nuestros fieles difuntos; en segundo lugar, está en que cada integrante de esa familia se ponga de acuerdo en mantener la unidad con base al respeto y el compromiso entre uno y otro y, finalmente, en no ser rencorosos.
Con esos tres axiomas, Pozos Lorenzini se empieza a construir la confianza y la unidad hacia adentro de las familias, y después está la fortaleza y evita que sus miembros se desvíen por vicios y violencia.