El Presidente de México Enrique Peña Nieto no solo tiene la bandera de cabeza.
Más bien tiene todo el país de cabeza.
A 9 meses de que culmine su gobierno y con altas probabilidades de entregar el poder a la oposición, Peña Nieto tiene tantos problemas sociales y de gobernabilidad que exhiben un país y gobierno desordenado, débil y sin líder.
Por tanto abuso cometido por sus allegados, Peña Nieto desaprovechó la oportunidad de pasar como el Gran transformador y terminó como el villano.
Ni siquiera la milicia lo respeta, pues llama poderosamente la atención que la bandera haya sido mal colocada
en un acto que representa al mayor símbolo nacional.
Qué le puede suceder a Peña Nieto si tiene la bandera, Seguridad, gobernabilidad y economía de cabeza?.
Solo le falta entregar el poder y negociar impunidad.