Fabián Gómez
Ya sin pudor alguno, su equipo se atrevió a transmitir un video en donde Sheinbaum le envía una felicitación, pero por su cuarto informe, hace un año, tan es así, que ella refiere claramente “tres más uno son cuatro”.
La desesperación del equipo de Nacho Mier ya es de tal magnitud, que ha empleado la guerra negra en contra del puntero en las encuestas, el senador por Morena Alejandro Armenta.
Y a pesar de que insiste en su cercanía con Sheinbaum y AMLO, simplemente es una mentira porque tienen identificados cada uno de sus errores y abusos en perjuicio de la Cuarta Transformación.
Ayer por ejemplo, Juan Carlos Alonso, sobrino de Martha Érika Alonso, presumió sus simpatías por Ignacio Mier, pese a que su tía y ex esposo, los Moreno Valle, se robaron la elección en el 2018, lo que representa una verdadera afrenta para el presidente López Obrador. Se burlan pues de los delitos que cometieron.
Por eso a Mier ya lo tienen detectado, porque simula ser un fundador de Morena cuando en el 2018 apoyó a los Moreno Valle a restarle votos a AMLO con dos de sus principales socios: Enrique Doger y Arturo Rueda. Doger fue candidato del PRI a la gubernatura de Puebla y Rueda es el extorsionador que estuvo preso 14 meses por extorsión y múltiples delitos.
AMLO y Sheinbaum deben conocer perfectamente a la gente que rodea a Nacho Mier, toda vez que hay otros dos como Fernando Manzanilla, quien se peleó con su cuñado Rafael Moreno Valle por ambiciones políticas y Paco Ramos, el ex yerno de Rosario Robles Berlanga.
Mier está a punto de recibir una mala noticia: los cientos de millones de pesos que ha gastado en su fallida precampaña, serán pruebas en su contra para que los declare ante las autoridades ministeriales, fiscales y electorales.