EL IMPARCIAL

En su columna titulada “A juicio de Amparo”, publicada este miércoles 8 de mayo en el periódico Excélsior, Casar lamenta el uso aparentemente indiscriminado del aparato del Estado para atacar a aquellos que critican la gestión gubernamental.

“Señor Presidente: ha logrado amargarme profundamente con sus mentiras, pero no logrará silenciarme con sus calumnias tan infundadas como indignas de su investidura. Mi trabajo y el de Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad no pararán”.

María Amparo Casar

Contexto para comprender el caso de Amparo Casar

La activista señala que estas acciones son una respuesta a sus críticas reflejadas en su reciente libro “Los puntos sobre las íes. El legado de un gobierno que mintió, robó y traicionó” (Debate, 2024), donde expone que la administración actual no ha cumplido con los principios que promueve.

El mencionado libro, publicado a principios de abril, se centra en el análisis de la gestión gubernamental y las contradicciones entre sus promesas y acciones.

El caso de María Amparo Casar cobra relevancia luego de que Petróleos Mexicanos (Pemex) revelara el expediente del ‘Caso Márquez Padilla’, esposo de Casar fallecido en 2004 por suicidio en instalaciones de la paraestatal.

Pemex alega que Casar utilizó sus influencias para agilizar el cobro de una pensión mensual y un seguro de vida, sumas que, según la empresa, no debían aplicarse debido al suicidio del funcionario.

Crítica a la exposición de datos personales

“Tal vez eso es lo que cala, que las evidencias muestran, como dice el subtítulo de mi libro, que el legado de este sexenio es que mintió, robó y traicionó”

María Amparo Casar

Casar, en su respuesta, critica la facilidad con la que el gobierno difunde información personal de sus “adversarios”, contrastando con la opacidad en otros temas de interés público.

La activista lamenta además que el presidente utilice políticamente la muerte de su esposo, subrayando la contradicción entre sus acciones y sus principios declarados.

“Paradójicamente, fueron las autoridades capitalinas, entonces encabezadas por el propio presidente y su procurador Bernardo Bátiz, quienes supuestamente cedieron a mi influyentismo y procedieron a la alteración de documentos para que yo pudiera cobrar la pensión a la que tenía derecho. Si eso ocurrió, como el presidente dice en su libro, quienes cometieron una falta fueron él y su procurador.”

La socióloga también agradece el apoyo recibido de diversos sectores tras la exposición de sus datos personales por parte del gobierno. Activistas, periodistas, académicos y ciudadanos han expresado su respaldo a Casar, aunque este ha sido desdeñado por el presidente López Obrador al considerarlos “opositores” y “adversarios”.