De esta forma, la inflación permaneció por tercera quincena consecutiva dentro del rango objetivo fijado por el Banco de México de 3 puntos +/- un punto porcentual.
En su comparación inmediata, el Índice Nacional de Precios al Consumidor registró un incremento de 0.27% de la segunda mitad de junio a la primera de julio, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El comportamiento del nivel de precios en el país se explica por bajas importantes en los precios de algunos agropecuarios con alta incidencia en su calculo. Se registró también, por primera vez en varios meses, una alta incidencia en el comportamiento de los precios de productos relacionados con el cuidado personal.
Los energéticos son los productos que le dieron más presión a la inflación, ya que durante la primera quincena de julio presentaron un aumento de 1.19 por ciento anual.
En contraparte, después de ligar algunas quincenas con bajas en su precio, la gasolina de bajo octanaje (tipo Magna) registró un aumento de precio de 0.47% de la segunda quincena de junio a la primera de mayo en su análisis nacional. Este ligero encarecimiento influyó en el nivel de precios de manera importante, siendo el tercer producto con mayor incidencia en su cálculo sólo por debajo del pollo y la cebolla.