El abogado Paulo Díez, quien ha denunciado presunto actos de corrupción de OHL México, solicitó a autoridades de Estados Unidos investigar la venta de un par de máquinas de barreras móviles para el Viaducto Elevado por parte de una empresa creada por un amigo personal del presidente Enrique Peña Nieto con un nombre casi idéntico a la compañía estadounidense Barrier Systems, propiedad del magnate Warren Buffett.
En una serie de cartas enviadas a la Comisión de Valores, el Departamento de Justicia y la Embajadora estadounidense en México, Roberta Jacobson, Díez consideró que el caso debe investigarse bajo la Ley de Prácticas de Corrupción en el Extranjero de EU.
Diez, quien es asesor jurídico de la empresa Infraiber, también envió también una carta al presidente Enrique Peña Nieto para que solicitarle que se investigue la participación del secretario Gerardo Ruiz Esparza, quien fue titular de Comunicaciones en el Estado de México cuando él fue gobernador.
En la carta enviada a las autoridades de Estados Unidos y a la matriz de Barrier Systems, Díez señala que la empresa de “Operadora Barrier Systems de México SA de CV”, creada por Ricardo Arturo San Román Dunne, amigo personal de Peña Nieto, pudo haber sido utilizada para “malversar fondos” de un proyecto -las barreras móviles- que no eran necesarias y están abandonadas.
“Operadora es una entidad que fue registrada en diciembre de 2007, después de que el proceso de licitación del Viaducto Elevado fue hecho público, pero antes de que OHL México ganara la concesión, con el propósito de adquirir e importar las mencionadas máquinas de barreras móviles, a fin de venderlas casi inmediatamente (bajo un acuerdo previo) a OHL México a casi dos veces al precio en que fueron adquiridas”, explica en la carta.
Díez advierte a la matriz de Barrier Systems que, si de verdad participó en la venta, podría estar involucrado en un potencial caso de corrupción.
“Si Barrier Systems trabajó con el Gobierno del Estado de México en el diseño de las bases de licitación, entonces legalmente su participación (como vendedor) en la venta de las máquinas de barreas móviles para el Viaducto Elevado podría ser, en el mejor de os casos, cuestionable”, dice el documento.
Por su parte, el abogado de Infraiber dijo al presidente Peña Nieto:
“Le solicito que el Gobierno federal a su cargo inicie a la brevedad una investigación seria que permita determinar si OHL México pagó a Ruiz Esparza y/o a cualquier empleado público, directa o indirectamente, en dinero o en especie, cualquier tipo de soborno por el otorgamiento de la concesión del Viaducto Bicentenario”.
Ruiz Esparza fue el encargado de modificar, a través del Acuerdo 01/2009, el título de concesión del Circuito Exterior Mexiquense, con lo cual entregó 850 millones de pesos a OHL México a cambio de 3 años más de concesión y para que comprara maquinaria de ayuda para tráfico.
La entrega del dinero coincidió con la compra de las máquinas a Barrier Systems a través de la intermediaria creada por el amigo de Peña Nieto.
En los mismos documento se da cuenta que Barrier Systems, la empresa original de EU, vendió en unos 250 millones de pesos las máquinas a su supuesta subsidiaria “Operadora Barrier Systems en México”, propiedad de San Román, pero ésta la revendió a OHL en 485.4 millones. Es decir, al doble de su precio.
Ricardo Arturo San Román Dunne está ligado a Peña Nieto por varios lazos. Su hermano, Roberto San Román Dunne, es compadre del hoy presidente, pues fue padrino de comunión de su hija mayor, Paulina Peña Pretelini.
La misma familia San Román fue la responsable de vender una residencia a Peña Nieto en el club de golf Gran Reserva en Ixtapán de la Sal, a finales de 2005.