Pese al poco tiempo de vida que tiene el Sindicato Independiente de Trabajadores Audi (Sitaudi), los trabajadores insisten que hay corrupción y malos manejos de recursos de su líder gremial Álvaro López Vázquez.
Este domingo desde temprano comenzaron las asambleas divisionales en la planta Audi instalada en el municipio de San José Chiapa. El futuro es incierto. Por un lado es el grupo que lucha por la remoción en el cargo de Álvaro López; por otra parte, dicho personaje quien está operando para no ser destituido.

La tensión creció desde hace dos meses, tiempo que los trabajadores han solicitado una asamblea general, pero el líder gremial solo cedió para que se hagan hoy asambleas divisionales y no una general.

López Vázquez ha sostenido que para removerlo en el puesto se necesita el 66 % de los votos en su contra, situación que se prevé difícil de alcanzar con las asambleas divisionales, pues hay obreros que manifiestan que hay presión del líder gremial para no votar en su contra.

Sin embargo, comenzaron las asambleas divisionales que decidirán el futuro de su sindicato. Estas se realizan a puerta cerrada y comenzaron a las 9 de la mañana. A las 11:00 se registró una manifestación del grupo inconforme que exigió una vez más una asamblea general.

Ante este hecho, la empresa Audi ha tenido que tomar medidas de seguridad para que los obreros pasen a votar. Pero los obreros acusan que hay excesos, porque les revisan todo a su ingreso.