Un grupo de vecinos se manifestaron nuevamente contra la tala ilegal de árboles que se realiza en un predio conocido como Vivero Santa Cruz, pidieron a las autoridades estatales intervenir para evitar que continúe el ecocidio.

Por ello esta mañana se presentaron al lugar representantes de los gobiernos de Cuautlancingo y Puebla para acompañar al actuario enviado por el Juez Tercero federal para supervisar el número de árboles derribados.

En un recorrido al interior del predio de alrededor de 4.6 hectáreas, donde finalmente se concluyó que tras la clausura del predio en los primeros días de octubre del año pasado, se contabilizaron 54 árboles derribados, colocando nuevamente sellos de clausura para seguir con el proceso jurídico.

En tanto, integrantes del autodenominado "Unión Pro Vivero" al grito de “arboles sí, tala no”, colocaron en la malla ciclónica del vivero varias pancartas en donde aseguraron que la tala a baja densidad ha continuado, siendo en las noches una o dos veces por semana cuando llevan a cabo el derribo de los árboles.

Sergio Lagarde, vecino del lugar aseguró que la primera tala y por la que se clausuró el predio se derribaron especies como cedro blanco y ahuhuete, por lo que se valora en millones de pesos la sanción económica a lo que pueden hacer acreedores los propietarios de dicho predio.

Cabe señalar que en la pasada manifestación que realizaron los vecinos, la Secretaría de Desarrollo Rural, Sustentabilidad y Ordenamiento Territorial (SDRSOT) del gobierno de Puebla, a través de Twitter informó que se fincarían responsabilidades contra los responsables de la tala.