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Ya fue destituido del cargo de general de división y, al parecer, en represalia, orquestó este miércoles la movilización de una facción militar para irrumpir en la sede del Palacio Presidencial, desde donde despacha el mandatario Luis Arce.

Ahí encontró al presidente de Bolivia e intercambiaron palabras. Arce le ordenó que retirara a las Fuerzas Armadas y Zúñiga se negó.

Juan José Zúñiga, que tenía el mando militar más alto en el país desde 2022, se reveló ante el gobierno de Arce y amenazó con encarcelar al expresidente Evo Morales en caso de insistir en postularse como candidato presidencial en los comicios electorales de 2025.

Este personaje, ahora antagónico, dijo este miércoles que los militares a su cargo intentan “reestructurar la democracia” en Bolivia.

“Las Fuerzas Armadas pretenden reestructurar la democracia, que sea una verdadera democracia. No de unos cuantos, no de unos dueños que ya tienen 30, 40 años manejando el país”.

Declaró rodeado de soldados y tanques militares afuera del Palacio.

Juan José Zúñiga Macias “estaba en la cuerda floja”; desde hace unos días circulan rumores de su probable destitución, a raíz de las declaraciones de inconformidad de los posibles planes de Evo respecto a su participación como candidato presidencial el próximo año.

Nombran nueva cúpula militar

Este mismo miércoles, después del intento de toma del Palacio Presidencial de La Paz, encabezado por Zúñiga, el presidente boliviano Luis Arce tomó juramento a una nueva cúpula de las Fuerzas Armadas.