En medio de la pandemia nacida en un mercado húmedo de Wuhan, el régimen chino permitió la inauguración en las últimas horas de su festival de carne de perro en condiciones higiénicas que horrorizarían a expertos sanitaristas de todo el mundo. Como cada año en la ciudad de Yulin, Guangxi, miles de personas se acercaron a la feria más grande de este tipo de animales, que son exhibidos en condiciones de poca higiene en mostradores y sin refrigeración.
De acuerdo con agencias de noticias, el régimen lanzó una tímida campaña para evitar su realización. Pese a las protestas de los activistas a favor de la vida animal, el mercado abrió sus puertas y miles de personas se acercaron a comprar la carne. El festival anual de 10 días en la ciudad de Yulin, en el sudoeste, generalmente atrae a miles de visitantes, muchos de los cuales compran perros que se exhiben en jaulas estrechas para cocinarlos en ollas.
La epidemia, que ha provocado la muerte de más de 470 mil personas, emergió a fines de 2019 en un mercado en Wuhan en el cual se vendían animales vivos y a partir de entonces se han reforzado las leyes sobre el comercio de animales.