Gabriela García Guzmán
El Gobierno del Estado dio a conocer que en 2026 pondrá en marcha un ambicioso programa de infraestructura hidráulica con una bolsa superior a los 5 mil millones de pesos, cuyo propósito es garantizar agua potable y mejorar los procesos de saneamiento en la zona metropolitana de la capital durante los próximos cinco años.
El esquema contempla la participación conjunta del Ejecutivo estatal, los ayuntamientos, la empresa Agua de Puebla y la Comisión Nacional del Agua (Conagua), con la meta de responder al incremento en la demanda del recurso en esta región del estado.
De acuerdo con el coordinador del gabinete estatal, José Luis García Parra, el plan arrancará con una primera fase en la que se destinarán 60 millones de pesos para elaborar los proyectos ejecutivos, mismos que estarán listos en marzo de 2026. Dichos estudios permitirán diseñar la infraestructura de potabilización y tratamiento que se desarrollará en los siguientes años.
En cuanto al arranque de obras, se prevé que en el Presupuesto de Egresos de 2026 se etiqueten 300 millones de pesos para comenzar con la ejecución, recursos que serán gestionados también ante la Cámara de Diputados federal. García Parra subrayó que la colaboración con Agua de Puebla será determinante, pues la compañía tiene obligaciones de inversión derivadas del convenio de concesión vigente y estas se encuentran bajo la supervisión directa del gobierno.
La estrategia integral no solo busca ampliar el abasto y mejorar la red de distribución, sino también garantizar instalaciones de saneamiento adecuadas y enfrentar uno de los principales retos de la metrópoli: la escasez y la falta de tratamiento del agua.
De manera paralela, el plan se enlazará con las acciones de rescate y saneamiento del Río Atoyac, donde la Federación invertirá 3 mil millones de pesos, como parte del Plan Hídrico Nacional.
