Al ser cuestionado sobre el caso de la niña Yaz, el gobernador Miguel Barbosa Huerta reveló en conferencia de prensa que la menor rechazó la visita de su madre, que con antelación pidió verla para poderla abrazarla.
De acuerdo con el mandatario estatal, al momento de que la menor le fue informado de que su mamá quería verla, ella se alteró física y psicológicamente y se negó a recibirla y a gritos pidió no verla.
El ejecutivo del estado refirió que se hicieron todas las gestiones entre el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y la Fiscalía General del Estado (FGE), para cumplir con la petición formulada por la madre de Yaz, de nombre Alejandra.
Una vez que se logró conceder el permiso, la mujer debería ingresar con la supervisión también de la activista Frida Guerrera, pero al momento de que se iba a dar la visita y convivencia entre ambas, la niña fue informada de que su madre la quería ver y empezó a convulsionarse de tal forma que dijo que no quería verla, mucho menos estar con ella.
La reacción de la menor, fue de tal magnitud, que los médicos decidieron suspender la visita y avisarle a la madre de que Yaz no quería verla, por lo que la visita al final de cuentas se canceló, pese a que su madre insistía en ingresar al cuarto donde se encuentra.
Cabe recordar que la menor, que fue violentada física y mentalmente, se encuentra aún grave en el Hospital, y los doctores que la atiende, hacen todo lo posible por mantenerla con vida, pues el pronóstico hasta ahora es que ella sigue muy grave.