Ariana Grande no lo está pasando nada bien desde el atentado de Mánchester. Sin embargo, lo que muchos considerarían una reacción natural el hecho de la cantante haya volado de inmediato a casa para estar con sus seres queridos, descansar, pasar el trago amargo, asimilar lo sucedido y tomar decisiones, para otros es un gesto poco cortés con las víctimas del 22 de mayo.
Piers Morgan, uno de los presentadores de la televisión británica más polémicos por sus feroces críticas, y rostro conocido en el mundo del entretenimiento por Britain's Got Talent, America's Got Talent y El Aprendiz: Celebridades, aprovechó la visita de la Reina Isabel II a las víctimas del ataque para hacer una impactante reflexión que desató la furia de los Arianators:
"Si la Reina pudo visitar a las víctimas en el hospital, también la estrella por la que ellos pagaron para ver", publicó el periodista en su cuenta de Twitter.
Fans y padres de familia sumamente tocados por la tragedia se dividieron en un debate sobre qué es lo que realmente necesitan las víctimas y qué debe hacer la intérprete de Into You:
Insensible, poco empático y exagerado fueron algunas de la respuestas que Morgan recibió por esta observación. Cuando el periodista trató de aclarar su punto, el resultado fue peor. Algunos usuarios catalogaron esta serie de tweets como una clara tendencia de Morgan a criticar a las mujeres y hacer comentarios de este tipo.
"Esperaba que ella se quedara, visitara y consolara a sus fans y a las familias de quienes murieron".
Ariana Grande lo dijo, "No tengo palabras", y tiene un punto. Qué cantante querría que sus fans o su música fueran el escenario de un hecho como éste.
Por lo pronto, Latinoamérica puede estar seguro de una cosa: Ariana estará ahí para seguir con su gira.