“Queríamos a Bowie en la película, pero no estaba disponible”, declaró Amy Hubbard a The Huffington Post. Hubbard, que fue la directora de casting de la famosa trilogía de fantasía épica, confirmó que David Bowie fue uno de los nombres que se barajaron para dar vida ni más ni menos que al mago Gandalf.
“La idea inicial de Peter Jackson”, aseguró Hubbard, “era que David Bowie diese vida a Gandalf”. Aunque el personaje fuera finalmente interpretado por Ian McKellen, al parecer Jackson y su equipo habrían intentado en primera instancia darle el papel a Bowie. “Llamamos a Chris, su agente, y le hicimos la propuesta”, continúa Hubbard, “pero nos dijo que David estaba demasiado ocupado esos meses”.
Así, el autor de Starman, aunque ni siquiera llegó a hacer el casting necesario para enrolarse en la película de Peter Jackson, estuvo muy, muy cerca de convertirse en Gandalf el Blanco.
De haberse hecho realidad la voluntad de Jackson, Bowie habría sumado seis películas -las tres de El Señor de los Anillos más las tres partes de El Hobbit- a su carrera como actor, pues no olvidemos que también ha participado en títulos como Dentro del Laberinto, Twin Peaks, La última tentación de Cristo, Principiantes o El hombre que cayó en la Tierra, de la que era el protagonista absoluto.