Es posible que ningún padre piense que las películas de Dwayne Johnson sean la mejor elección para disfrutar de una tarde de cine con sus hijos pequeños. Aunque de vez en cuando participa en filmes familiares (pronto estrenará la esperada segunda parte de Jumanji), la mayor parte de la filmografía de este actor se compone de títulos de acción y violencia en los que interpreta al tipo duro que su físico presupone.
Pero detrás de esa masa de músculos se esconde un hombre sensible capaz de emocionarse con historias protagonizadas por pequeños héroes como Jacob O’Connor, un hombre de 10 años que salvó la vida a su hermano de dos después de que casi se ahogara en la piscina. Esto lo hizo gracias a una técnica de reanimación que aprendió viendo una de esas películas no aptas para niños, San Andreas, filme de catástrofes no recomendado para menores de 16 años.
Después de que un medio local hiciera eco de esta hazaña, la historia de este chico se hizo viral en redes sociales. Lo que nunca imaginó Jacob es que además de la satisfacción de salvar la vida a su hermano se llevaría otro premio no más importante pero si muy emocionante: poder conocer en persona a su ídolo.
Y no ha sido en un programa tipo Ellen donde este tipo de sorpresas son el pan nuestro de cada día. No, fue el propio Dwayne Johnson quien, nada más conocer la historia, le mandó un mensaje a través de su Instagram para decirle que era él el que quería conocer en persona a “un héroe real” y que por eso iba a invitar al niño y a toda su familia a que viajaran a Canadá para visitar el rodaje de Skyscraper, su nueva película.
Aquello ocurrió el pasado 26 de agosto, pero ha sido hoy cuando hemos podido conocer cómo continuaba la historia gracias al actor, que ha colgado un extenso reportaje sobre la visita en el que le vemos abrazando al muchacho, invitándole a comer todos los dulces que quiera del plató y, finalmente, grabando un vídeo juntos contando su historia.
“Jacob estaba supernervioso y fue muy tímido todo el tiempo que pasamos juntos, así que me pareció una buena idea hacerle reír y hablar”, escribe el actor. “Me emocionó todavía más cuando apareció en el set llevando puesta una camiseta que se había hecho con mi símbolo del toro por delante y detrás una foto mía sujetando a mis dos perritos, Brutus y Hobbs, después de que los rescatara de nuestra piscina”.
Tal y como explica Johnson en el vídeo, uno de esos perritos murió. “Pero no fue esa foto lo que me emocionó, sino el hecho de que este chico tenga el corazón tan grande como para poner a mis perritos en su camiseta después de haber salvado la vida de su hermano de dos años. ¡Qué día más especial y que chaval más especial! Gracias Jacob por ser tan maravilloso y, sobre todo, por ser la clase de persona en la que aspiro convertirme algún día”.