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Dejando de lado el pasado y abrazando con todas sus fuerzas a su presente, Galilea Montijo empoderó a las mujeres maduras y divorciadas al confirmar que se puede ser feliz con las segundas oportunidades, como ella lo ha hecho tras su divorcio del empresario mexicano Fernando Reina Iglesias.

A través de su cuenta de Instagram, la guapísima presentadora de 50 años ha compartido con sus fans algunos vistazos de su viaje al otro lado del mundo al lado de su guapísimo novio español, Isaac Moreno, con quien le ha dado una segunda oportunidad al amor, y se ve más feliz, radiante y jovial que nunca.

En las más recientes imágenes que publicó Galilea Montijo arrancó suspiros y demostró que a sus 50 años está como los buenos vinos: mejor que nunca. En ellas, aparece más candente que nunca, pero sin perder el porte y la elegancia, dentro de una bañera y con una toalla amarrada en la cabeza.

La conductora de la primera temporada de La Casa de los Famosos se despojó de toda prenda, luciendo únicamente unos lentes oscuros y un par de collares y pulseras, junto a una copa de vino y el paisaje de Tokio a sus espaldas, comprobando que se encuentra en la mejor etapa de su vida, a pesar de los dimes y diretes.

Y es que, desde hace algunos días, se ha especulado bastante respecto a la vida de Galilea Montijo tras su divorcio, e incluso, recientemente, generó controversia una imagen que le ha dado la vuelta a todo México, de su ex esposo junto a su nueva novia, una guapísima conductora y conferencista mexicana, que, para variar, también ha trabajado en Televisa.

La situación subió de nivel ahora que su ex marido compartió un video en el que se muestra dándole una serenata a su nueva novia, Elda Molina, a la que llevó a sus hijos, los dos mayores de su primer matrimonio con Paola Caruss, así como a Mateo, hijo que tiene en común con Gali.

Se trata de Elda Molina, quien hasta hace unas semanas ocupó el cargo de directora nacional de Televisa Sonora, mismo en el que permaneció por varios años.

Desde que Fernando Reina publicó la romántica imagen de ambos desde un restaurante, las miradas se volcaron en Galilea Montijo, quien, con cachetada con guante blanco, ha comprobado que su pasado ya se quedó muy atrás, eso sí, siempre reafirmando la cordial relación que tiene con el padre de su hijo Mateo, por el bien del menor.

Es por eso que los chismes no le han quitado el sueño, y con la cabeza en alto, sigue disfrutando de su espectacular viaje junto a su guapísimo galán, quien también le ha demostrado su amor incondicional presumiéndola ante el mundo.