Amber Heard acusó a su exesposo Johnny Depp de abusar física y verbalmente de ella mientras él abusaba de las drogas y el alcohol, y afirmó que en varias ocasiones llegó a temer por su vida.

El lunes, en el primer día de su testimonio en la Corte Superior en Londres durante el juicio por la demanda de difamación presentada por Depp contra el tabloide The Sun por un artículo de abril de 2018 en el que fue tildado de “marido golpeador”, Heard también rechazó acusaciones de que ella misma fuera una consumidora de drogas y bebedora empedernida, además de una mujer controladora y abusiva.

Al relatar una serie de incidentes en su deteriorada relación, en los que supuestamente Depp le lanzó una botella de champán y un celular, Heard insistió en que cualquier cosa que haya hecho fue solo en defensa propia.

“Cuando sentí mi vida amenazada, traté de defenderme y eso comenzó a suceder cuando teníamos años de relación, años de violencia”, declaró en la corte. “Antes de eso, ni siquiera trataba de defenderme, simplemente me iba”.

La abogada de Depp, Eleanor Laws, presentó una grabación de una pelea de la pareja en la que Depp acusa a Heard de arrojarle ollas y otros objetos en la víspera. Heard dijo que ella le pegó a Depp, pero no le dio puñetazos, y que sólo le arrojó cosas “para escapar de él”.

Heard dijo que la discusión, al igual que muchas otras, comenzó porque Depp había perdido el conocimiento en el baño tras otro episodio de excesos.

“Me preocupaba la vida de Johnny y este es el contexto de esta discusión, una de muchas que terminó en un altercado físico”, dijo.

Depp, de 57 años, demanda a la editora de The Sun, News Group Newspapers, y al editor ejecutivo del diario, Dan Wootton, por el artículo. El astro de Hollywood, que niega rotundamente haber abusado de Heard, estuvo en el tribunal para oír la declaración de su exesposa, quien presentará su testimonio a lo largo de tres días.

En una declaración escrita que se hizo pública cuando subió al estrado, Heard, de 34 años, dijo que durante su relación con Depp soportó “puñetazos, bofetadas, patadas, cabezazos y estrangulamiento”, y que “algunos incidentes fueron tan severos que temí que fuera a matarme, ya fuera intencionalmente o simplemente perdiendo el control y yendo demasiado lejos”.

Según Heard, Depp “amenazó explícitamente con matarme varias veces, en especial hacia el final de nuestra relación”. Heard dijo que Depp culpó de sus acciones “a una tercera persona de creación propia” a la que el actor se refiere como “el monstruo”.

La actriz también rechazó la evidencia de testigos como un guardia de seguridad de Depp, Sean Bett, quien dijo que ella era quien comenzaba las peleas.

En nueve días de testimonios en la Corte Superior, el juez Andrew Nicol también escuchó a varios empleados actuales y pasados que han apoyado la versión de Depp sobre los hechos.

Heard alegó en una declaración escrita que Depp “a menudo no recordaba lo que había hecho” debido a la cantidad de alcohol y drogas que consumía, y que “para él era como si no hubiese ocurrido”.