MADRID -- Por cuarta temporada consecutiva, el Atlético se atraviesa en el camino del Real Madrid hacia el título de Champions. Dos veces logró arrebatársela de las manos para coronarse campeón, en 2014 y 2016.
Entremedias, el Real Madrid consiguió el pase a semifinales a costa del vecino antes de que la Juventus le eliminara para llegar a la final. Pero Zinedine Zidane no quiere mirar al pasado, evitando así el riesgo de que su equipo caiga en el error de asumir que la historia se repetirá por pura inercia.
“Para ellos es lo mismo, una semifinal. Pasó lo que pasó y tú no puedes servirte de lo que ha pasado. Lo que pasó, pasó. Ha sido positivo para nosotros pero ahora es completamente diferente y van a hacer lo posible para pasar”, señaló el técnico merengue tras el último entrenamiento de su equipo de cara al encuentro.
Lo que ha sido un obstáculo superado para el Real Madrid, han quedado grabados como momentos de gran amargura para los rojiblancos.
“El Atlético nos tiene que tener ganas por las dos Champions que les hemos ganado”, reconoció Isco en la víspera en una entrevista concedida a una casa de apuestas.
Pero para Zidane, la peligrosidad del Atlético de Madrid no viene del arraigado rencor intenta hacer entender a sus jugadores en que será un choque tan duro – o más – que los anteriores.
Y es que los choques europeos ante el Atlético de Madrid de los últimos cuatro años se han decidido de manera dramática: una en tiempos extra, otra en la tanda de penales y otra con un gol solitario de último minuto en el encuentro de vuelta.
Y Zidane, que ya ha dirigido hasta cuatro derbis madrileños en año y medio, no espera que el de mañana sea un partido “distinto” a los anteriores.
“Distinto (partido), no. Los conocemos y ellos a nosotros muy bien. No vamos a inventar nada; preparamos muy bien el partido y estamos listos para jugar. Luego veremos mañana Nunca se sabe lo que va a pasar antes de un partido. Nosotros tenemos ganas de que empiece, eso sí”, dijo el técnico.
CR7 le pidió patear el último penal a Zidane porque tuvo una visión de que haría el de la victoria EFE
En el aspecto psicológico, el técnico se ha volcado a hacer entender a sus hombres que pese al récord ganador en Europa frente al Atlético, no deben colgarse el cartel de “favoritos” y nuevamente ha recurrido a que la eliminatoria está a “en un 50-50 como todas las eliminatorias. Mañana es un partido, vamos a intentar hacer el máximo y nada más sin pensar en que hay un partido de vuelta”.
Y sobre todo, quiere que dejen de lado la añeja rivalidad local de los dos equipos de la capital española y que no piensen en el choque como un derbi local, pues para ellos es “más que eso; es una semifinal de Champions league”, según apuntó Dani Carvajal.
“Hay motivación extra y natural por ser una semifinal; es un rival muy importante. La rivalidad no ha cambiado mucho; yo creo que es… dos equipos de la capital, están acostumbrados a jugar entre ellos.
“No es un derbi mañana; es una semifinal, pero la rivalidad es la misma. Lo que tenemos que hacer, lo tenemos que hacer muy bien”, dijo el entrenador.
Y es que Zidane, que sufrió ante el Atlético la primera de las únicas cuatro derrotas en su historial como técnico del Real Madrid, reconoce en los vecinos a uno de los rivales “más duros” que le ha tocado enfrentar.
“Es un equipo últimamente, cuatro o cinco años, que son muy buenos. Cada año se mejoran y es un equipo que a nosotros nos mete siempre en dificultades. Pero como muchos equipos. La fuerza que tienen es que nunca bajan los brazos, pase lo que pase. Es un equipo que siempre lucha, pelea, que sabe sus armas”, dijo el técnico.